Este es el cambio de actitud que necesito para este año, que es el año del Tigre...así que digamos que este es mi año. Me siento, renovada, hoy y creo que se vienen tiempos de buena fortuna y eso me alegra bastante. No sé como cambió pero creo que empezó cuando deje definitivamente de mirar un sendero que tenía un aspecto inseguro y con puentes a que parece que se vienen abajo en cualquier minuto. Las contradicciones, las mías, las suyas. Las mentiras. El desamor. Decidí no mirar más atrás con la idea de volver corriendo si algo cambia. Decidí que es definitivo y me gusta hoy por hoy poder estar segura de eso. Estando segura, me siento mejor, ya no necesito controlar lo incontrolable. Estando segura, no se dará lugar al arrepentimiento. Siempre lo digo, no me arrepiento de nada de lo que haya hecho, porque todo lo que hice, tanto bueno como malo, me llevó a estar de pie el día de hoy.
Hoy veo otros ojos al final del camino, un camino rodeado de naturaleza, de aire fresco, de buenaventura, y hoy sé, que desde hoy, y lo digo por tercera vez, desde hoy, voy a disfrutar muy despacio esta interesante opción que tengo delante mío.
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